SALVADOREÑOS ACUDEN A CAMPOS SANTOS EN UN 2 DE NOVIEMBRE ATÍPICO

Desde este día, las personas se han hecho presentes a los diferentes cementerios del país, en el marco del Día de los Difuntos conmemorado cada 2 de noviembre. Este año, la asistencia ha estado limitada por los protocolos de bioseguridad que las autoridades han tomado por la pandemia de Covid-19.

En el Cementerio General de Soyapango no se ha permitido la entrada de personas mayores de 60 años, niños y mujeres embarazadas. A la vez, se han estado cumpliendo las medidas de seguridad en las entradas de dicho campo santo.

Medidas similares se han puesto en práctica en el cementerio La Bermeja, ubicado en San Salvador. La entrada de personas se limita a tres integrantes por familia, permitiéndoles estar hasta una hora dentro de las instalaciones.

«Al interior ya de los cementerios pueden estar una hora y solo se permiten tres personas por puesto. Así que estas son las medidas básicas que tenemos. También se les indica no traer flores con jarrones de agua», comentó Mauricio Chavarría, director ejecutivo de la administración del cementerio La Bermeja.

Chavarría también explicó que no se han permitido las ventas, ya que eso podría generar aglomeraciones. Además, argumentó que el principal problema que se ha dado en dicho cementerio es que muchas personas están intentando ingresar a menores de edad.

El ingreso a los parques memoriales de San Salvador está coordinado y monitoreado por personal de la Policía Nacional Civil (PNC) y elementos del Cuerpo de Agentes Metropolitanos (CAM).