HUNGRÍA OBLIGARÁ POR DECRETO A LAS MUJERES A ESCUCHAR EL LATIDO DEL CORAZÓN DEL FETO ANTES DE REALIZAR UN ABORTO.
Un decreto, publicado en la Gaceta Oficial de Hungría y que ya ha sido firmado por el ministro de Interior, Sandor Pinter, obliga a que las mujeres que se sometan a un aborto, deberán escuchar primero el latido del corazón del feto, y debe presentar un documento que certifica que ha recibido información sobre los signos vitales del feto.
La actual ley, en vigor desde 1992, determina que entre las semanas 12 y 24 de gestación, la mujer puede optar libremente por el aborto, sin más requisitos que su propia decisión. En casos excepcionales, ante riesgo para la madre o el feto, el aborto es asimismo posible más allá de esas 24 semanas.
En casos excepcionales, generalmente por razones médicas, cuando hay diagnósticos de una patología en el feto incompatible con la vida o peligra la vida de la madre, el aborto es asimismo posible en un momento más tardío del embarazo.
El partido izquierdista Coalición Democrática ha pedido en un comunicado que el Gobierno aclare si está preparando o no la modificación de las reglas del aborto.