CIENTÍFICOS LOGRAN REGENERAR CÉLULAS RENALES DAÑADAS.

Las células renales dañadas están más cerca de poder regenerarse, restaurando la función renal que se ha deteriorado a causa de lesiones o enfermedades renales agudas o crónicas.

Esto según ha demostrado por primera vez un grupo de científicos de la Escuela de Medicina Duke-NUS, el Centro Nacional del Corazón de Singapur (NHCS), que han trabajado en colaboración con investigadores en Alemania. En concreto, han descubierto que bloquear una proteína perjudicial denominada interleucina-11 (IL-11) permite que las células renales dañadas se regeneren.

«La insuficiencia renal es una epidemia global», ha recordado la profesora asistente Anissa Widjaja, bióloga molecular del equipo cardiovascular de la Escuela de Medicina Duke-NUS, un programa exclusivo de investigación de trastornos metabólicos (CVMD). «Singapur ocupa el primer lugar en el mundo en insuficiencia renal inducida por diabetes y el cuarto en términos de prevalencia de insuficiencia renal. La contribución de la enfermedad renal crónica a la mortalidad está aumentando rápidamente, lo que sugiere que existen deficiencias en los enfoques terapéuticos actuales».

Con el objetivo de encontrar formas de restaurar la capacidad de los riñones para regenerar las células dañadas, Widjaja trabajó con el profesor Stuart Cook, profesor de medicina cardiovascular de la Fundación Tanoto en el Centro Médico Académico SingHealth Duke-NUS y el Programa CVMD, y el profesor decano de Duke-NUS, Thomas Coffman, un presitigioso nefrólogo, que se asociaron con científicos en Alemania para investigar el papel de la IL-11, que se sabe que provoca la formación de cicatrices en otros órganos, como el hígado, los pulmones y el corazón, en la enfermedad renal aguda y crónica.

Los resultados de la investigación muestran que esta proteína está involucrada en el desencadenamiento de una cascada de procesos moleculares en respuesta a la lesión renal que tiene como consecuencia la inflamación, la fibrosis (cicatrización) y la pérdida de función. Los investigadores descubrieron, además, que inhibir la IL-11 con un anticuerpo neutralizante puede prevenir, e incluso revertir, el daño renal en este contexto. Sus hallazgos se han publicado en Nature Communications