MUERE UNA MUJER TRAS ROBAR UNA PATRULLA Y PROVOCAR UN ACCIDENTE FATAL EN FLORIDA


En un trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad de Florida, Kendra Dalyn Boone, de 33 años, lideró una persecución a alta velocidad que terminó en un devastador accidente, cobrándose la vida de tres personas, incluida ella misma. El incidente comenzó cuando Boone robó un vehículo patrulla del Despacho del Sheriff del Condado de Marion y emprendió una huida frenética de las autoridades.

La persecución comenzó en un centro comercial de Silver Springs, Florida, donde Boone intentó robar las llaves de un vehículo a una persona mayor antes de lanzarse hacia la patrulla del agente Christopher Witte. A pesar de las instrucciones del agente de desplazarse hacia la parte trasera del vehículo, Boone se introdujo por la ventana del pasajero y aceleró bruscamente, dejando atrás al oficial desconcertado.

La Patrulla de Autopistas de Florida, encargada de la investigación del choque, describió cómo Boone, evadiendo a las autoridades con maniobras peligrosas, alcanzó velocidades superiores a 160 kilómetros por hora en su intento desesperado de escapar.

La persecución culminó trágicamente cuando Boone intentó adelantar y chocó de frente con una camioneta GMC negra ocupada por tres personas, resultando en su muerte y la de dos ocupantes de la camioneta, un hombre y una mujer de Waterloo, Carolina del Sur, de 73 y 72 años respectivamente, que fallecieron en el acto. Un tercer pasajero fue llevado al hospital en estado crítico.

El Sheriff Billy Woods del condado de Marion expresó su consternación por el incidente y destacó el extenso historial criminal de Boone, que incluía 13 cargos por delitos graves. Woods lamentó que Boone estuviera en libertad, señalando que la tragedia podría haberse evitado si hubiera permanecido en prisión.

Este trágico suceso ha avivado el debate sobre las políticas de seguridad y la gestión de individuos con antecedentes penales, así como el uso de vehículos patrulla con las llaves puestas. El sheriff destacó la necesidad de reconsiderar los protocolos de seguridad y las decisiones judiciales en casos de reincidentes criminales para evitar tragedias como esta.