LA FEDERACIÓN ESPAÑOLA DE FÚTBOL SANCIONA AL GETAFE POR INSULTOS RACISTAS DE SUS AFICIONADOS

El Comité de Disciplina de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha impuesto una sanción al Getafe CF, consistente en la clausura parcial de su estadio por tres partidos y una multa de 27.000 euros, debido a los insultos racistas proferidos por sus aficionados durante el último partido de LaLiga contra el Sevilla FC.

Los hechos ocurrieron en el minuto 68 del encuentro, cuando los seguidores locales dirigieron insultos racistas hacia el jugador Marcos Acuña y posteriormente hacia el técnico Quique Sánchez Flores, utilizando términos como «mono» y «gitano».

La sanción se fundamenta en la comisión de infracciones muy graves, tipificadas en el Código Disciplinario de la RFEF. Según lo establecido, el Getafe deberá identificar y cerrar parcialmente la zona del estadio desde la cual se originaron los insultos, en los tres próximos encuentros disputados como local. Durante estos partidos, la zona clausurada deberá mostrar mensajes visibles de condena a actos racistas y de apoyo al juego limpio.

El árbitro del partido, Javier Iglesias Villanueva, reportó los incidentes en el acta del encuentro, deteniendo el juego y anunciando por megafonía la situación conforme al protocolo establecido. El entrenador del Sevilla, Quique Sánchez Flores, denunció públicamente los insultos recibidos, calificándolos de «aberrantes».

Esta sanción refleja la firme postura de la RFEF contra cualquier manifestación de racismo o intolerancia en el fútbol, reafirmando su compromiso con la erradicación de este tipo de conductas en el deporte.