LA MELATONINA: CLAVE EN EL SUEÑO Y LA SALUD, PERO CON MATICES A CONSIDERAR
La melatonina, hormona producida naturalmente en la glándula pineal del cerebro humano, desempeña un papel crucial en la regulación del ciclo sueño-vigilia y otros procesos biológicos. Su función principal radica en ajustar el ritmo circadiano del cuerpo, marcando el momento de dormir y despertar según la exposición a la luz.
En el sueño, la melatonina induce cambios que preparan al cuerpo para el descanso, como la reducción de la temperatura corporal y la disminución de la actividad. También interviene en la regulación de neurotransmisores relacionados con el sueño, promoviendo un descanso más profundo y reparador.
Además de su influencia en el sueño, la melatonina actúa como antioxidante, protegiendo las células del daño oxidativo, y participa en la regulación del sistema inmunológico y otros aspectos de la salud.
Varios factores pueden afectar su producción, como la exposición a la luz, especialmente a la luz azul de dispositivos electrónicos, y el envejecimiento, que puede reducir la producción de melatonina. Además, ciertos alimentos, como frutas, frutos secos y cereales, pueden promover su producción de forma natural.
Aunque la melatonina puede ser beneficiosa para el sueño y la salud en general, su uso debe ser supervisado por profesionales de la salud, ya que no es una solución universal para los problemas de sueño y puede tener efectos secundarios.