LA PARTICIPACIÓN CIUDADANA DE LOS SALVADOREÑOS EN EL EXTERIOR NO SE LIMITA AL VOTO

Cesar Ríos
Experto en migración / Director Asociación Agenda Migrante El Salvador

AAMES La participación ciudadana de los salvadoreños en el exterior no debe limitarse solo al
ejercicio del voto. Los salvadoreños que viven fuera del país tienen un gran potencial para
contribuir al desarrollo económico y social de sus comunidades de origen.
La mayor movilidad humana de El Salvador fue en las décadas de los 70 y 80, hoy esos
compatriotas en el exterior están manifestando su retorno principalmente porque ya se
encuentran en su etapa de retiro laboral.
La participación ciudadana de los salvadoreños en el exterior es un tema de gran relevancia
para el desarrollo de El Salvador y la construcción de una sociedad más inclusiva y
participativa. La diáspora salvadoreña se extiende por todo el mundo, y sus miembros
representan una valiosa fuente de conocimiento, experiencia y recursos que pueden contribuir
significativamente al progreso de El Salvador y sus comunidades de origen.
Es importante generar una estrategia de alianza para que los salvadoreños en el exterior
puedan contribuir al desarrollo de sus comunidades de origen no solo a través del voto, sino
también mediante la inversión empresarial y el gasto social. Estas formas de participación
ciudadana pueden tener un impacto significativo en el bienestar económico y social de las
comunidades salvadoreñas.
Una forma en que los salvadoreños en el exterior pueden contribuir al desarrollo de sus
comunidades es mediante la inversión empresarial. Muchos salvadoreños en el extranjero han
adquirido habilidades y conocimientos en áreas como la gestión empresarial, la tecnología y
las finanzas, que podrían ser valiosas para iniciar y hacer crecer negocios en El Salvador.
Además, la inversión empresarial puede generar empleo y mejorar la economía local.
Otra forma en que los salvadoreños en el exterior pueden contribuir a sus comunidades de
origen es a través del gasto social. Muchas personas que viven en el extranjero envían dinero a
sus familias en El Salvador, y ese dinero a menudo se utiliza para cubrir necesidades básicas
como la alimentación, la vivienda y la educación. También han canalizado recursos hacia
proyectos sociales que beneficien a un mayor número de personas, como la construcción de
escuelas o la mejora de infraestructuras comunitarias.
Un reto grande para el diseño de políticas públicas actualizadas, que podrían implementarse
para mejorar la participación ciudadana de los salvadoreños en el exterior y maximizar su
impacto en el país y sus comunidades de origen. Algunas de estas políticas podrían incluir:

  1. Crear un marco regulatorio claro y estable para las inversiones de los salvadoreños en el
    extranjero: El gobierno podría establecer incentivos fiscales, financieros y garantizar su
    portabilidad de seguridad social para quienes ya están en condición de retiro. También
    podría establecer una legislación para protegerles como consumidores e inversionistas
    generando un punto de contacto centralizado que brinde información y asistencia técnica a
    los salvadoreños interesados en invertir en el país.
  2. Fomentar la creación de redes empresariales y de inversión: El gobierno podría promover la
    creación de redes empresariales y de inversión entre los salvadoreños en el exterior y los
    empresarios locales. Estas redes podrían facilitar la identificación de oportunidades de
    inversión y colaboración empresarial, así como el intercambio de conocimientos y
    experiencias.
  3. Establecer programas de financiamiento para proyectos comunitarios: El gobierno podría
    establecer programas complementarios tanto financieros como técnicos para fortalecer el
    financiamiento para proyectos comunitarios liderados por los salvadoreños en el extranjero,
    con el objetivo de apoyar iniciativas sociales que mejoren las condiciones de vida en sus
    comunidades de origen. El programa 3 por 1 de Mexico es ideal.
  4. Facilitar la transferencia de conocimientos y tecnología: El gobierno podría establecer
    programas para facilitar la transferencia de conocimientos y tecnología de los salvadoreños
    en el exterior a las empresas y comunidades locales. Estos programas podrían incluir
    capacitación técnica, intercambio de expertos y colaboración en proyectos de investigación
    y desarrollo.
  5. Establecer canales de comunicación efectivos: El gobierno podría establecer canales de
    comunicación efectivos entre los salvadoreños en el exterior y las autoridades locales,
    líderes políticos y líderes empresariales y gremiales. Esto permitiría una mejor coordinación
    y colaboración en proyectos de desarrollo comunitario, así como una mayor transparencia y
    rendición de cuentas en la gestión de los recursos públicos.
    Además, la banca nacional podría desarrollar productos financieros específicos para los
    hogares receptores de remesas, como cuentas de ahorro vinculadas a las remesas o
    préstamos para pequeños negocios que sean respaldados por las remesas. Estos productos
    podrían estar diseñados para ayudar a los hogares a maximizar el valor de las remesas y
    mejorar su capacidad de gestión financiera y sobre todo incentivar a los salvadoreños en el
    Exterior para interesarse en inversiones locales.