NUEVO DISPOSITIVO INTELIGENTE OFRECE TRATAMIENTO PERSONALIZADO PARA PACIENTES CON PARKINSON

Un innovador dispositivo inteligente, controlado por la actividad cerebral, promete revolucionar el tratamiento de los problemas de movilidad e insomnio en pacientes con la enfermedad de Parkinson. Este avance, conocido como estimulación cerebral profunda adaptativa (aDBS, por sus siglas en inglés), mejora significativamente las técnicas tradicionales utilizadas en el manejo de esta enfermedad neurodegenerativa.

El dispositivo, desarrollado por investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF), monitorea en tiempo real la actividad cerebral del paciente y ajusta automáticamente los impulsos eléctricos según las necesidades detectadas. Esta tecnología avanzada crea un sistema de retroalimentación continua, permitiendo que la estimulación se adapte dinámicamente a la fluctuación de los síntomas, lo que minimiza los efectos secundarios.

A diferencia de la estimulación cerebral profunda convencional (ECP), que aplica un nivel constante de estimulación, la aDBS ofrece una respuesta más precisa al regular la intensidad del tratamiento en función de la actividad cerebral del paciente. Esto resulta en un control más eficaz de los síntomas motores y no motores del Parkinson, mejorando la calidad de vida de los afectados.

El profesor Philip Starr, líder del estudio y catedrático de Cirugía Neurológica en la UCSF, lleva más de una década trabajando en la base de esta tecnología. Su equipo ha demostrado que este dispositivo puede reducir los síntomas de los pacientes hasta en un 50 %, según los resultados de un ensayo clínico reciente publicado en Nature Medicine. Tres de los cuatro participantes del estudio pudieron identificar cuándo estaban recibiendo el tratamiento adaptativo, gracias a la notable mejora en sus síntomas.

Además de aliviar los problemas de movilidad, esta tecnología podría ser clave para mitigar el insomnio en los pacientes con Parkinson. Un segundo estudio, publicado en Nature Communications, mostró que el dispositivo puede detectar patrones cerebrales asociados con el sueño y prevenir despertares nocturnos, ofreciendo un enfoque más integral al tratamiento de la enfermedad.

Los investigadores creen que este avance podría tener aplicaciones más allá del Parkinson, incluyendo trastornos psiquiátricos como la depresión y el trastorno obsesivo-compulsivo, marcando el inicio de una nueva era en las terapias de neuroestimulación. A pesar de los prometedores resultados, los científicos advierten que aún hay desafíos por superar antes de que esta tecnología esté disponible de manera generalizada.