REALIZAR TAREAS DEL HOGAR PUEDE MEJORAR EL BIENESTAR EMOCIONAL, SEGÚN ESTUDIO

Un reciente estudio demuestra que actividades domésticas como hacer la cama o lavar los platos no solo contribuyen a mantener un hogar ordenado, sino que también tienen un impacto positivo en la salud mental. Según los expertos, estas tareas cotidianas generan una sensación de control y responsabilidad sobre el entorno, lo que ayuda a disminuir el estrés y aumentar la satisfacción personal.

Realizar estas actividades al inicio del día y marcarlas como completadas fomenta un sentido de logro que repercute en otros aspectos de la vida. Además, vivir en un espacio limpio y organizado favorece la concentración y promueve un ambiente relajado.

Los investigadores destacan que este efecto puede ser especialmente útil para personas que se sienten sobrecargadas o que luchan por mantener la motivación. Al realizar estas acciones diarias, se fortalece la autodisciplina y se construye un mayor sentido de propósito.