ESTUDIO PROPONE EL EJERCICIO FÍSICO COMO TRATAMIENTO FUNDAMENTAL PARA PACIENTES CON PARKINSON

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Aarhus, Dinamarca, y publicado en la revista Neurología, sugiere que el ejercicio físico debería ser un componente crucial en el tratamiento de pacientes con Parkinson.

Basándose en evidencia actual, los expertos proponen un cambio de paradigma: el ejercicio debería ser prescrito como parte integral del tratamiento para personas en etapas iniciales de Parkinson, junto con la terapia médica convencional.

La investigación parte de la premisa de que el ejercicio puede contribuir a prevenir el desarrollo de la enfermedad, posiblemente retrasar su progresión y ser un tratamiento efectivo para varios de sus síntomas más prominentes.

El estudio recuerda que el Parkinson es un trastorno neurológico progresivo e incurable que conlleva efectos motor y no motor adversos.

En este contexto, se destaca que actualmente no hay ningún fármaco capaz de prevenir o detener la progresión de la enfermedad, y los tratamientos farmacológicos sintomáticos tienen efectos limitados y pueden causar efectos secundarios.

Por lo tanto, se enfatiza la importancia de identificar intervenciones que puedan prevenir, retrasar, detener o mitigar la enfermedad.

En este sentido, los autores del estudio señalan que el ejercicio es seguro y constituye un pilar fundamental en la rehabilitación del Parkinson, con potenciales beneficios que podrían cambiar la práctica clínica.

Asimismo, los investigadores afirman que la evidencia disponible respalda al ejercicio como un factor de estilo de vida protector que puede prevenir la enfermedad, actuar como una terapia potencial para modificar el curso de la enfermedad y ser un tratamiento sintomático eficaz.